Consejos preventivos para combatir el calor
El 'Plan de acciones preventivas contra los efectos del exceso de temperaturas',
que mantiene activo en verano la Consejería de Salud, recomienda extremar
la prudencia para prevenir posibles problemas ante las altas temperaturas.
En este periodo es importante adoptar medidas preventivas especialmente en
la atención a personas mayores, niños, trabajadores y deportistas
al aire libre.
Los problemas de salud asociados a las altas temperaturas pueden evitarse con
medidas muy simples:
- Beba mucha agua o líquidos sin esperar a tener sed. Evite
las bebidas alcohólicas, café, té o cola y las muy azucaradas.
- En los días de intenso calor permanezca en lugares frescos a
la sombra. Tome una ducha o un baño fresco.
- Baje las persianas evitando que el sol entre directamente . No abra
las ventanas cuando la temperatura exterior es más alta. Evite usar
máquinas y aparatos que puedan producir calor en las horas más
calurosas.
- Haga comidas ligeras que le ayuden a reponer las sales perdidas por
el sudor (ensaladas, frutas, verduras, gazpachos o zumos).
- Evite las actividades en el exterior en las horas más calurosas,
sobre todo si las actividades son intensas.
- Si tiene que permanecer en el exterior procure estar a la sombra, use
ropa ligera y de color claro, protéjase del sol, use sombrero. Utilice
un calzado fresco, cómodo y que transpire.
- Si es muy mayor, toma medicación o padece una enfermedad crónica
Consulte con su médico acerca de las medidas suplementarias que debe
adoptar. Siga tomando sus medicamentos. No se automedique.
- Las quemaduras solares se producen por el sol directo sobre la piel
aunque el día no sea muy caluroso. Deben evitarse, estando menos tiempo
al sol y usando cremas de protección.
Ayude a las personas más frágiles de su entorno
- Las personas mayores que viven solas, las personas con facultades mentales
disminuidas o incapaces de adoptar medidas protectoras sin ayuda.
- Deben ser visitados o controlados al menos una vez al día (mejor
dos) por un miembro de la familia, amigo, vecino o por los servicios sanitarios
o de cuidados a domicilio.
- Niños de 0 a 4 años. Asegúrese de que beben mucho
líquido, vístalos con ropa clara y ligera y no los deje nunca
solos en automóviles al sol o con las ventanas cerradas.
- Las personas que realizan trabajos intensos, en el exterior o actividades
deportivas intensas deben reducir su actividad en las horas de máximo
calor, protegerse del sol y beber abundantemente bebidas que repongan los líquidos
y las sales perdidas por el sudor (agua, zumos, frutas, gazpacho, bebidas deportivas
o rehidratantes...).
Problemas que puede originar el calor y cómo actuar ante ellos
El calor puede producir desde irritaciones en la piel y calambres hasta un
aumento de temperatura tal, que puede llevarnos incluso a la muerte si no recibimos
atención médica urgente.
Nuestro organismo está compuesto de un 60 por ciento de agua. La pérdida
de agua y sales minerales por el sudor, si no se repone, produce síntomas
como dolor de cabeza, mareos, debilidad muscular o calambres, náuseas
y vómitos e incluso pequeñas elevaciones de la temperatura corporal.
Por ello, es importante reconocer los problemas de salud que produce el calor:
Calambres: Calambres musculares (en piernas, abdomen o brazos), sobre todo
si se suda mucho durante una actividad física intensa.
¿Qué se debe hacer?
- Parar toda actividad y descansar en un sitio fresco.
- Evitar la actividad física intensa durante varias horas.
- Beber zumos ligeros y bebidas deportivas diluidas en agua.
- Consultar a su médico si los calambres duran más de una
hora.
Agotamiento por calor: Ocurre después de varios días de calor:
la sudoración excesiva reduce los fluidos corporales y la restauración
de las sales. Principales síntomas: debilidad, fatiga, mareos, náuseas,
desmayo...
¿Qué se debe hacer?
- Descansar en lugar fresco.
- Beber zumos o bebidas deportivas diluidas en agua.
- Consultar a su médico si los síntomas empeoran o duran
más de una hora.
Golpe de calor: Constituye un problema grave: el cuerpo es incapaz de controlar
la temperatura, que se va incrementando rápidamente y puede alcanzar
los 40º C.
Los síntomas principales son: calor, sequedad y piel roja, pulso rápido,
dolor intenso de cabeza, confusión y pérdida de conciencia.
¿Qué se debe hacer?
- Llamar a urgencias.
- Mientras se espera, enfriar el cuerpo, estar en una habitación
oscura, poner paños de agua fría sobre el cuerpo o darse un baño
o ducha fría. Sin ayuda médica urgente, un golpe de calor puede
ser fatal.