Conocer sus efectos sobre el organismo - cerebro, aparato digestivo, embarazo, sexualidad,obesidad...- es la mejor forma de evitar el abuso en el consumo del alcohol
Las enfermedades provocadas por una alimentación incorrecta generan secuelas físicas, psicológicas y laborales y tienen repercusiones económicas, sociales y sanitarias de gran importancia en los países desarrollados.
Es una iniciativa que pretende poner al alcance de todos los ciudadanos -de una forma amena y didáctica- los fundamentos de una correcta alimentación como forma de prevenir enfermedades.
Entender el papel de los nutrientes y sus efectos en el organismo puede contribuir, de forma decisiva a prevenir o corregir desde la base enfermedades como la diabetes, el infarto, la hipertensión, la obesidad, ... y las relacionadas con el aparato digestivo en general.
Daños cerebrales, gastritis, duodenitis, hepatitis alcohólica, cirrosis, esterilidad, atrofia testicular, aumento de peso, ... son consecuencias de un abuso en el consumo habitual de bebidas alcohólicas, una adicción con una alta tasa de mortalidad en España.
Una persona que tome diariamente el equivalente a litro y medio de cerveza o algo menos de 1 litro de vino o 150 cc de coñac, ginebra o whisky tiene una probabilidad del 80% padecer patologías hepáticas al cabo unos 10 años.
Pero, incluso, un bebedor ocasional que entre en coma etílico puede fallecer por un fallo hepático fulminante.
La mortalidad de la hepatitis alcohólica es de un 60%.
Un gramo de alcohol y produce al ser quemado por las células 7 calorías y un gramo de grasas produce 9 calorías, mientras que un gramo de hidratos de carbono o de proteínas producen 4 calorías.
Por tanto, 1 gramo de alcohol engorda casi el doble que los hidratos de carbono o que las proteínas y sólo un poco menos que las grasas.
La mujer embarazada debe abstenerse de tomar bebidas alcohólicas. En la actualidad el síndrome alcohólico fetal es la causa más frecuente de retraso mental por encima del síndrome de Down o de la espina bífida.
Estos temas y otros más que la mayoría de los ciudadanos intuye pero no conoce suficientemente, se abordan de una manera divulgativa pero rigurosa en la presente unidad.
El conocimiento de las repercusiones del alcohol puede ser una vía de disuasión en el consumo muy importante, como lo acredita una reciente encuesta de la Fundación Alcohol y Sociedad (FAS), según la cual el 72% de los menores que reciben información sobre el alcohol reconocen ser más prudentes a la hora de beber; el 37% asegura haber trasladado a sus amigos las consecuencias nocivas del alcohol y el 19% declara haber dejado de beber.
Es un conjunto de actuaciones basadas en una serie de unidades temáticas divuIgativas, en formato multimedia, bajo la dirección técnica del doctor Juan Madrid Conesa, que explican objetivamente a los ciudadanos los efectos beneficiosos y las posibles consecuencias perjudiciales derivadas de los diferentes tipos de alimentos y de otras sustancias que se ingieren o se administran o se consumen (alcohol, drogas, tabaco, medicamentos,...).
A tal fin se han elaborado dos unidades específicas para la presentación del proyecto:
A través de los portales en Internet: