Un informe de evaluación sobre la utilidad del capuchón cervical de silicona, publicado en 2004(1), en base a una revisión sistemática y a un estudio comparativo, comenta que el capuchón cervical presenta similares tasas de candidiasis vaginal que las usuarias del diafragma. Las muestras tomadas de citología cervico vaginal al inicio de su empleo, a las 12 semanas y cuando se abandona el método no muestra diferencias estadísticamente significativos en el número de citologías anormales entre las usuarias de diafragma y de capuchón cervical.
La actualización en 2012 de la revisión sistemática referenciada en el informe(2), no incluye nuevos estudios. Comenta que el posible incremento de cambios en las citologías vaginales entre las usuarias de capuchones cervicales, frente a otros métodos anticonceptivos de barrera, continúa sin aclarar. Las evaluaciones realizadas están basadas en una pequeña muestra y tienen poder estadístico solo para demostrar grandes diferencias en la tasa de lesiones.
La búsqueda realizada no ha encontrado estudios que analicen el número de citologías con metaplasias en usuarias de capuchón cervical comparado con población no usuaria de otro método anticonceptivo.