[Se han encontrado diferentes nomenclaturas en los documentos consultados. Según UpToDate(1), la amigdalectomía total, también se denomina amigdalectomía completa, extracapsular o subcapsular; la amigdalectomía parcial también se conoce como amigdalectomía subtotal, intracapsular o amigdalotomía. DynaMed(2), describe la amigdalotomía o criptolisis como una variante de la amigdalectomía intracapsular en la que únicamente se extirpa la parte exofítica de la amígdala].
En general, la documentación consultada coincide en señalar que, aunque la amigdalectomía parcial (AP) parece tener menos complicaciones postoperatorias que la amigdalectomía total (AT), su efectividad en la apnea obstructiva del sueño (AOS) de los niños aún no está bien estabecida y se precisan más estudios a largo plazo.
El sumario de evidencia de UpToDate sobre la adenotonsilectomía para la AOS de los niños(1), refiere que ambas técnicas tienen sus ventajas y desventajas y, aunque está aumentando el uso de la AP, su papel aún no está claro y la técnica más habitualmente usada para la extirpación de las amígdalas es la AT.
Aunque la AP podría permitir una recuperación más rápida, en algunos pacientes podría aumentar el riesgo de un nuevo crecimiento amigdalar, y no se ha establecido cuál es la técnica óptima en niños con AOS.
El sumario considera que, en general, la evidencia disponible es limitada debido a la heterogeneidad en los resultados y la medición de los mismos, el alto riesgo de sesgo y el predominio de períodos de seguimiento cortos. Y afirma que se necesitan más estudios para identificar qué tipo de pacientes podrían beneficiarse de la AP a largo plazo.
Este documento recoge la información de una revisión sistemática (RS) publicada en 2025(3) que comparó ambas técnicas en niños con trastornos respiratorios obstructivos del sueño y que incluyó 32 estudios con un total de 9.430 niños (17 ensayos clínicos aleatorizados [ECA], 3 estudios prospectivos no aleatorizados y 12 estudios retrospectivos). El metaanálisis realizado halló las siguientes diferencias:
- La recuperación es más rápida con la AP, medida en función del tiempo hasta volver a la dieta normal (diferencia de medias [DM] -2,43 días, intervalo de confianza [IC] del 95%: de -3,57 a -1,28; 6 estudios, 447 pacientes) y del tiempo hasta el cese de los analgésicos (DM -2,97 días, IC 95%: de -3,48 a -2,47; 8 estudios, 838 pacientes).
- La AP se asocia con menos riesgo de sangrado postoperatorio: 0,9% vs 2,9%; riesgo relativo (RR) 0,33; IC 95% 0,21-0,52; 10 estudios, 5.098 pacientes.
- Pero la AP podría tener un mayor riesgo de infección de garganta, especialmente en el primer al año tras la cirugía: 9,2% vs 5,0%; odds ratio (OR) 1,86, IC 95% 1,32-2,63; 7 estudios, 2.141 pacientes.
- La AP se asocia con un mayor riesgo de recurrencia:
- Nuevo crecimiento amigdalar: 10,8% vs 1,6%; OR 8,28, IC 95% CI 2,66-12,64; 6 estudios, 685 pacientes).
- Tasas de reintervención: 5,1% vs 0,3%; OR 6,66; IC 95% 2,66-16,64; 9 estudios, 1.189 pacientes).
- Riesgo de trastorno respiratorio obstructivo del sueño recurrente: 11,0% vs 5,4%; OR 2,16, IC 95% 1,20-3,86; 6 estudios, 715 pacientes; pero confianza en los resultados limitada por sesgo de publicación.
Por su parte, el SE de Dynamed sobre la amigdalectomía(2) explica que algunos clínicos consideran que la amigdalectomía extracapsular es una técnica demasiado extrema para mejorar la obstrucción de las vías respiratorias superiores y prevenir la infección amigdalina recurrente, y prefieren la intracapsular.
Este otro sumario recoge la información de varias RS que comparan ambas técnicas en niños:
- Según una RS de Cochrane(4) la AP, en niños con patología respiratoria obstructiva del sueño, podría asociarse con un menor riesgo de complicaciones postoperatorias que precisan intervención y un menor tiempo de vuelta a la actividad normal (nivel 2 de DynaMed*). La evidencia para poder comparar la eficacia de ambas técnicas fue insuficiente. La RS incluyó 22 ECA con 1.984 niños con trastornos respiratorios obstructivos del sueño que fueron seguidos durante periodos de 6 días a 6 años. Los estudios tenían limitaciones metodológicas o de procedimiento.
- También según otra RS(5), la AP, en comparación con la AT, podría reducir el riesgo de hemorragia secundaria, readmisión y tiempo de regreso a una dieta normal en niños con trastornos respiratorios obstructivos del sueño (nivel 2 de DynaMed*). Esta RS incluyó 32 estudios con 19.181 niños: 19 ECA, 3 estudios de cohortes prospectivos y 10 estudios de cohortes retrospectivos.
- Según una tercera RS(6), la amigdalectomía intracapsular y adenoidectomía con microdebridador podría resultar en menos dolor posoperatorio y un retorno más rápido a la dieta y actividades normales en comparación con la amigdalectomía extracapsular (nivel 2 de DynaMed*). Esta incluyó 25 estudios con 8.078 niños: 8 ECA, 9 estudios de cohortes retrospectivos, 3 estudios de cohortes retrospectivos y 3 series de casos.
En la búsqueda de guías de práctica clínica publicadas en los últimos 5 años, se ha identificado una que compara ambas técnicas(7). La recomendación nº 15 de esta guía francesa de 2020 establece que:
- En el niño pueden realizarse la amigdalectomía extracapsular o la intracapsular.
- Ambas tienen la misma eficacia en el tratamiento del síndrome de apnea-hipopnea obstructiva del sueño (grado A*).
- La intracapsular reduce la morbilidad postoperatoria precoz y el retraso en la recuperación de una actividad normal (Grado A*).
La guía explicaba que la elección de la técnica quirúrgica dependía de la formación y experiencia de cada otorrinolaringólogo y de la participación del anestesista. Añadía que la RS realizada de estudios clínicos (incluidas algunas series de casos) encontró algunas limitaciones que podían llevar a una mala estimación de las complicaciones: inclusión de pacientes rehospitalizados, seguimientos inadecuados y conflictos de intereses.
En la revisión realizada, le guía encuentra que:
- “Las técnicas intracapsulares parecen reducir el dolor posoperatorio y favorecer una reanudación más precoz de una nutrición adecuada y la reincorporación a la vida normal” (nivel de evidencia [NE] 1*).
- Las técnicas intracapsulares “probablemente reducen el riesgo de hemorragia posoperatoria, relacionada con la reducción del calibre de los vasos amigdalinos durante su paso intracapsular” (NE 1*).
- Ambas técnicas parecen igual de eficaces en la AOS (NE 1*).
Y menciona que un metaanálisis de Cochrane(4) “destaca que, en niños sometidos a cirugía por trastornos respiratorios obstructivos del sueño, las técnicas intracapsulares probablemente resulten en una reincorporación precoz a la actividad normal y una ligera reducción de las complicaciones posoperatorias que requieren intervención médica, con o sin rehospitalización. Sin embargo, los resultados fueron muy inciertos en cuanto a la calidad de vida, el riesgo de hemorragia perioperatoria, el dolor posoperatorio y el uso de analgésicos, las medidas de eventos respiratorios, el comportamiento, la recurrencia de trastornos obstructivos debido al nuevo crecimiento amigdalino, las tasas de reintervención y la incidencia de amigdalitis, lo que impide extraer conclusiones firmes sobre su ventaja sobre las técnicas extracapsulares (NE 1*)”.
Una RS(8) no incluida en los anteriores documentos comparó la eficacia de la amigalectomía intracapsular mediante coblación frente a la amigdalectomía extracapsular también mediante coblación. Se realizó una búsqueda bibliográfica entre el 11/03/2020 y el 08/04/2020 de estudios prospectivos y retrospectivos que compararan ambas técnicas en niños (≤ 18 años) con AOS o amigdalitis de repetición, en los que el dolor postoperatorio fuera el resultado principal. Se seleccionaron 6 estudios para la RS y 5 para el metaanálisis (3 evaluaban el dolor postoperatorio temprano y 4 el dolor postoperatorio tardío), con tamaños muestrales de entre 18 y 415 niños. Los resultados secundarios evaluados en los estudios se analizaron de un modo cualitativo. Los autores encuentran que la amigdalectoía intracapsular por coblación origina menos dolor tardío (no hubo diferencias en el dolor precoz), se asocia con menor sangrado y un regreso más precoz a la dieta y actividad normales. No obstante, señalan que la evidencia que sustenta estos hallazgos no procede de estudios de calidad de gran tamaño muestral y existe incertidumbre en cuanto a los resultados encontrados.
Una revisión narrativa (RN) publicada en 2021 sobre el manejo quirúrgico de la AOS(9) de los niños explicaba que, hasta la fecha, no existía una técnica quirúrgica de elección para realizar la amigdalectomía. Mencionaba que, aunque, en general, se consideraba que la AP producía menos sangrado que la AT, las características de los estudios disponibles eran muy dispares y dificultaban las comparaciones directas. Comentaba que el nuevo crecimiento de las amígdalas era una de las posibles complicaciones de la AP, que oscilaba del 0% al 16,6 % en las AOS, pero añadía que era un dato difícil de cuantificar debido a que muchos estudios no realizaban seguimientos a largo plazo.
Según otra RN, de 2023, que compara la AT frente a la AP(10), la posibilidad del nuevo crecimiento de las amígdalas tras la AP es uno de los factores que han limitado la adopción de esta técnica a pesar de sus prometedores resultados en la disminución de las complicaciones postoperatorias. El posterior crecimiento y reintervención se asocian con una edad más temprana, infecciones respiratorias altas y antecedentes de alergia y amigdalitis aguda. También apunta que son escasos los datos disponibles a largo plazo sobre el posterior crecimiento tras la AP y que son precisos más estudios enfocados en los resultados a largo plazo de la AP para poder cambiar las prácticas recomendadas.
Una tercera RN, más reciente, de 2024, sobre la amigdalectomía en niños con AOS(11), aporta la siguiente información:
- La AP ganó popularidad al inicio de los años 2000 como un medio para prevenir el dolor, acelerar la recuperación y reducir complicaciones como infecciones y sangrado.
- Varias RS han demostrado una menor duración el dolor, menores dosis de analgesia y un regreso más rápido a la dieta normal con la AP que con la AT.
- Una RS de Cochrane, debido a la calidad de los estudios disponibles, no pudo determinar la afectividad de la AP frente a la AT.
- Una desventaja de la AP es la posibilidad de posterior crecimiento amigdalar y la necesidad de una AT definitiva. Las tasas de posterior crecimiento varían del 2% al 6% y parecen estar asociadas con una edad menor de 12 años y con amigdalitis aguda postoperatoria. Aunque las tasas de reintervención suelen ser menores (1 %-2 %), la cirugía de revisión expone a los niños al riesgo de complicaciones derivadas de la anestesia y el propio procedimiento. Un estudio sueco mostró que el riesgo de complicaciones postoperatorias de estas AT tras la AP era mayor que cuando la AT se realiza como primera opción.
- Los estudios que compararon la AT por coblación con la AP por coblación, no mostraron diferencias en la gravedad del dolor inicial, pero la PT pareció prevenir el dolor tardío y mostró tasas más bajas de hemorragia secundaria.
- A pesar de la baja tasa de posterior crecimiento amigdalar de la AP y las mayores tasas de readmisión de la AT, la AT podría ser más costo-efectiva.
No se han identificado ECA de publicación posterior a la búsqueda realizada por la RS de 2025(3).
*Consultar niveles de evidencia y grados de recomendación en los documentos originales.


