[Según la American Occupational Therapy Association (AOTA)(1) «Terapia ocupacional (TO) es el uso terapéutico de las actividades de cuidado, trabajo y juego para incrementar la independencia funcional, aumentar el desarrollo y prevenir la incapacidad; puede incluir la adaptación de tareas o del entorno para alcanzar la máxima independencia y para aumentar la calidad de vida.»
La demencia frontotemporal (DFT)(2) es un trastorno neurodegenerativo que se caracteriza por alteraciones progresivas del comportamiento, la función ejecutiva y el lenguaje, afectando principalmente a personas menores de 65 años. Este trastorno se asocia con anomia expresiva y receptiva, déficits en la comprensión de palabras y síntomas conductuales como apatía, pérdida de empatía y desinhibición, todos ellos estrechamente relacionados con el deterioro funcional en las actividades cotidianas].
En la revisión realizada, se ha identificado documentación que sugiere la necesidad de incluir la TO como parte de las intervenciones no farmacológicas para el manejo de la DFT, ya que podría mejorar la calidad de vida tanto del paciente como del familiar/cuidador informal (diada).
Así lo explica la Revisión Sistemática (RS) publicada en 2023 sobre TO en pacientes con DFT(2). En ella se incluyeron once estudios sobre intervenciones de TO dirigidas a la diada y los autores concluyeron que se produjeron mejoras significativas en la calidad de vida tanto de los pacientes como de los cuidadores (ya que se alivia la carga de cuidado que sufren, quienes brindan atención a largo plazo). Se incide también, que un enfoque clave de estas intervenciones fue enseñar alternativas aceptables a los comportamientos de los pacientes con DFT, ya que estos se ven fuertemente influenciados por la propia enfermedad.
Los Sumarios de Evidencia (SE) consultados, resaltan la figura del profesional de TO como parte del equipo multidisciplinar necesario para el manejo de los pacientes con DFT:
- El SE de BMJ Best Practice(3), destaca la evaluación de la seguridad en el hogar, así como una evaluación de las necesidades de transporte, conducción y autocuidado por parte del profesional de TO, para realizar las modificaciones necesarias del entorno físico.
- El SE de Dynamed(4), distingue ofrecer un manejo no farmacológico multidisciplinario en el tratamiento de la DFT, para ayudar a mitigar el impacto de la enfermedad, como terapia del habla y el lenguaje, TO, asesoramiento psicológico o apoyo social. Proporcionar apoyo a los cuidadores, incluyendo educación, asesoramiento, apoyo psicológico y respiro programado.
- Y el SE de Uptodate(5), refiere que el tratamiento no farmacológico requiere una estrecha colaboración con los cuidadores del paciente y se basa en los siguientes pilares:
- seguridad,
- ejercicio y movilidad,
- terapia del habla ,
- las técnicas de modificación del comportamiento no farmacológicas pueden ser un complemento útil en el manejo de los comportamientos problemáticos en la DFT. Los hábitos o rituales compulsivos, la agitación y la ansiedad, son abordados desde la TO y requieren educación y apoyo del cuidador.
La búsqueda de documentos realizados en nuestro contexto sanitario y que informen sobre este aspecto, identifica distintas publicaciones que tratan de las demencias en general:
- una revisión narrativa que analiza la TO en personas con deterioro cognitivo en la comunidad foral de Navarra(6); expresa que, la intervención se inicia con una evaluación exhaustiva de la situación personal, continúa con el diseño e implementación de programas de estimulación de capacidades, habilidades, compensación de limitaciones y de intervención en las distintas áreas.
- la Guía de Práctica Clínica sobre la Atención Integral a las Personas con Enfermedad de Alzheimer y otras Demencias (publicada y no actualizada hace más de 5 años)(7), que remarca la figura del profesional de TO en el equipo multidisciplinar;
- sin embargo, otros documentos de consenso de profesionales como la guía oficial de práctica clínica en demencias(8), publicada por la Sociedad Española de Neurología, de todas las medidas no farmacológicas planteadas para tratar DFT (mencionadas anteriormente), sólo recomienda la intervención logopédica en pacientes con afasia primaria progresiva en fases iniciales de la DFT con el objetivo de mejorar el acceso léxico y maximizar las capacidades lingüísticas preservadas.


