Según la documentación revisada, en el paciente con fibrilación auricular (FA) no estaría indicada la determinación de troponinas en ausencia de clínica sugestiva de síndrome coronario agudo.
Los autores de los sumarios de evidencia (SE) de UpToDate sobre la FA(1,2) afirman que solo solicitan troponinas ante la sospecha de isquemia coronaria aguda.
Por otra parte, en uno de estos sumarios(2), se comenta que la troponina-T de alta sensibilidad podría utilizarse para valorar el riesgo trombóembólico de determinados pacientes. Y en el SE dedicado a la anticoagulación en la FA(3) se explica que, aunque las troponinas podrían influir en el riesgo tromboembólico, no están incluidas en los modelos de predicción de riesgo habitualmente utilizados.
También el SE de DynaMed sobre la FA de nueva aparición(4) indica que se considere la determinación de troponina en caso de sospecha de isquemia de miocardio. Y el SE sobre la profilaxis tromboembólica de la FA(5) menciona estudios en los que niveles elevados de troponina se han asociado con un mayor riesgo embólico.
Tampoco la troponina es una de las determinacions a realizar de forma rutinaria según el SE de BMJ Best Practice sobre la FA de nueva aparición(6), que indica que se solicite en pacientes seleccionados.
La determinación de troponinas no se encuentra entre los parámetros de laboratorio habituales recomendados en las guías(7,8) y guías de práctica clínica (GPC)(9-12) sobre FA consultadas.
La European Society of Cardiology(9) la incluye entre las pruebas adicionales a realizar en determinados pacientes: para investigar la enfermedad cardiovascular o afinar más en el riesgo ictus/sangrado.
En la GPC de la American Heart Association(10), aunque no se hace mención de forma explícita a la troponina, se argumenta que la FA no aumenta por sí sola el riesgo de isquemia, síndrome coronario agudo o embolismo pulmonar, por lo que la realización de forma rutinaria de pruebas para estas patologías en ausencia de síntomas o signos sugestivos de las mismas no aporta ningún beneficio. Según esta guía, “en pacientes con FA de nueva aparición las pruebas protocolizadas para isquemia, síndrome coronario agudo embolismo pulmonar no deberían realizarse de manera rutinaria para evaluar la etiología de la FA, a menos que haya signos o síntomas sugestivos de estas patologías” (recomendación 3: ausencia de beneficio; evidencia B-NR*).
Según la Cardiac Society of Australia and New Zealand(11), aunque el uso de marcadores adicionales (se incluye la troponina) a las escalas de riesgo embólico puede mejorar la capacidad predictiva de estas, aún no está claro su papel.
Por su parte, la guía Fisterra(7) explica que, aunque algunos estudios han demostrado que la troponina es útil para evaluar el riesgo de ictus, no están claros ni el punto de corte ni su efecto en las decisiones terapéuticas.
*Consultar grados de recomendación y niveles de evidencia en el documento citado.


