Consejería de Sanidad y Política Social. 04 July 2014
La Unidad de mama inicia una nueva técnica que permite un mejor abordaje para sus pacientes
Este tipo de cirugía es posible en pacientes que cumplan una serie de requisitos.
La Unidad del hospital de Santa Lucía diagnostica unos 160 nuevos casos anuales de cáncer.
La experiencia adquirida por la Unidad de Mama del Hospital General Universitario Santa Lucía, apoyada por la innovación tecnológica, explica José Aranda, jefe de esta unidad, nos ha permitido ofrecer una nueva técnica mínimamente invasiva en la mujer, la mamoscopia, y ampliar así la cartera de servicios que prestamos
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Se trata de una alternativa a la cirugía convencional que hace posible un mejor abordaje del cáncer de mama, con menos cicatriz y mejores resultados estéticos, y con una mejora en la recuperación de la paciente que está más cómoda en el post-operatorio y a la que, además, se le da el alta de hospitalización a las 24 horas
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Si bien es cierto, continúa el doctor Aranda, no todas las mujeres son candidatas y necesitamos que se den unas condiciones. La Unidad de Mama registra 160 casos nuevos cada año pero nuestra paciente ideal es aquella joven con una mama no demasiado voluminosa y preferiblemente no fumadora porque el tabaco produce un envejecimiento de la piel y una disminución del calibre de los vasos que la nutren, lo que puede llevar a pérdidas de la cubierta cutánea que se pretende preservar con un posterior fracaso de la técnica
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El procedimiento en sí consiste en delinear la zona a extirpar y hacer una incisión por la que introducir la óptica de laparoscopia que, con su cámara de televisión, va guiando al cirujano con la ventaja de que este aparato nos permite mantener el tacto sobre la pieza operatoria e ir quitando tejido con el bisturí eléctrico mientras se tiene visión directa sobre el campo operatorio
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La técnica puede emplearse cuando hay que quitar parte de la mama o hacer una mastectomía total y realizamos la reconstrucción en la misma intervención siempre y cuando tenemos la seguridad de que la paciente no va a tener que someterse a radiación posteriormente ya que la radioterapia posterior puede producir capsulitas retráctiles que obliguen a explantar la prótesis que se haya usado para la reconstrucción
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