TITULO Seguridad del medicamento

Seguridad del medicamento

Seguridad en el uso de los medicamentos

Los efectos adversos relacionados con la asistencia sanitaria son un problema importante de salud pública por su frecuencia y consecuencias para el paciente, el sistema sanitario y la sociedad, estando los medicamentos implicados en un porcentaje muy elevado de los mismos.

Los acontecimientos adversos relacionados con el uso de medicamentos se pueden producir en cualquier fase del sistema de utilización de medicamentos: prescripción, dispensación, administración y seguimento, y tanto en el ámbito de la Atención Primaria como de la Atención Especializada.

El estudio ENEAS realizado en 24 hospitales de nuestro país detectó que el 9,3% de los pacientes incesados sufren acontecimientos adversos ligados a la asistencia sanitaria y que el 37,4% de ellos estaban relacionados con la medicación, considerándose evitables el 34,8%.

Se estima que hasta el 1,4% de los pacientes ingresados pueden sufrir un acontecimiento adverso relacionado con los medicamentos y que éstos motivan un 4,7% de los ingresos hospitalarios, cifra que en los mayores de 65 años llega a alcanzar el 9,7%.

En el ámbito de la atención primaria, el estudio APEAS ha puesto de manifiesto que en la mitad de los efectos adversos, la medicación prescrita al paciente está presente como factor contribuyente (48,24%), siendo prevenible la mayor parte de ellos.

Estos datos permiten hacerse una idea de la gran trascendencia que tienen y descubren la necesidad de adoptar medidas de prevención.

Para reducir este problema es imprescindible que todos los agentes implicados en la utilización de los medicamentos, incluidos los pacientes, se conciencien de este problema y conozcan sus causas y las medidas básicas para evitarlos:

  • Las nueve soluciones de la OMS para la seguridad del paciente
    • La Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó en mayo de 2007 nueve soluciones para ayudar a reducir el daño derivado de la atención sanitaria. Las nueve soluciones se basan en las prácticas que han reducido los problemas relacionados con la seguridad del paciente en algunos países y al menos siete de ellas tienen relación directa con los medicamentos o los productos sanitarios.
      1. Medicamentos de aspecto o nombre parecidos.
      2. Identificación de pacientes.
      3. Comunicación durante el traspaso de pacientes.
      4. Realización del procedimiento correcto en el lugar del cuerpo correcto.
      5. Control de las soluciones concentradas de electrolitos.
      6. Asegurar la precisión de la medicación en las transiciones asistenciales.
      7. Evitar los errores de conexión de catéteres y tubos.
      8. Usar una sola vez los dispositivos de inyección.
      9. Mejorar la higiene de las manos para prevenir las infecciones asociadas a la atención de salud.
  • Manual de prevención de los errores de medicación en el sistema sanitario catalán.
    • Recomendaciones destinadas a prevenir errores de medicación en los diversos niveles de la cadena sanitaria en los que pueden producirse, adoptando un abordaje multidisciplinar que implica a los profesionales sanitarios, las autoridades sanitarias, la industria farmacéutica y los pacientes.
  • Objetivos de seguridad de la JCAHO (National Patient Safety Goals)
    • En julio de 2002 la JCAHO publicó los primeros National Patient Safety Goals (NPSG) para el año 2003, que comprendían un conjunto de seis objetivos específicos, dirigidos a mejorar la seguridad clínica en las instituciones sanitarias, incluyendo cada uno, como máximo dos recomendaciones. Estos NPSG se revisan cada año y se mantienen o sustituyen en función de las prioridades que puedan surgir. Los objetivos establecidos para los años 2003-2008 relacionados con el sistema de utilización de los medicamentos se centran en mejorar la identificación de los pacientes, mejorar la efectividad de la comunicación entre los profesionales sanitarios, mejorar la seguridad en el uso de los medicamentos, mejorar la seguridad de las bombas de infusión, conciliar los medicamentos del paciente y fomentar la participación activa de los pacientes en su atención.
  • Prácticas de seguridad del National Quatily Forum (NQF)
    • El NQF publicó en 2003 un conjunto de 30 prácticas de seguridad fundamentales para prevenir los errores asistenciales. Entre las prácticas que afectan al sistema de utilización de medicamentos se encuentran las siguientes: creación de una cultura de seguridad en la institución, participación activa de los farmacéuticos en todos los procesos de utilización de los medicamentos, prácticas relacionadas con la transferencia de la información y la comunicación entre todos los implicados en la asistencia y entre distintos niveles asistenciales y prácticas relacionadas con los procesos de dispensación y administración como la dispensación de medicamentos en dosis unitarias o el control de la utilización de los medicamentos de alto riesgo.
  • Prácticas para mejorar la seguridad de los medicamentos de alto riesgo (Ministerio de Sanidad y Consumo - Universidad de Salamanca)
    • Los "medicamentos de alto riesgo" son aquellos que tienen un "riesgo" muy elevado de causar daños graves o incluso mortales cuando se produce un error en el curso de su utilización. Esta definición no implica que los errores asociados a estos medicamentos sean más frecuentes, sino que de producirse, las consecuencias para los pacientes suelen ser más graves, por lo que han de ser objetivo prioritario en los programas de seguridad clínica.

Información para pacientes

Es importante para mejorar la seguridad en el uso de los medicamentos, la implicación activa del paciente, que sea co-responsable y participe junto con los profesionales sanitarios de su tratamiento.

  • Haga una lista de los medicamentos que utiliza, la dosis, cuando debe tomarlos y durante cuanto tiempo, incluyendo en la misma los medicamentos sin receta y las plantas medicinales. Lleve la lista siempre que acuda al médico general, al especialista o al Hospital.
  • Conozca los medicamentos que toma. Para ello pregunte a los profesionales sanitarios que le atienden, médicos, farmacéuticos y enfermeras.

Información para profesionales

Definiciones

¿Qué es un incidente por medicamentos?

Es el término que engloba todos los accidentes, problemas o sucesos inesperados o no deseados que se producen por error o no, durante los procesos de utilización de los medicamentos y que pueden o no causar daños a los pacientes. (American Society of Health-System Pharmacist. ASHSP).

¿Qué es un error de medicación?

Cualquier incidente prevenible que puede causar daño al paciente o dar lugar a una utilización inapropiada de los medicamentos, cuando estos están bajo el control de los profesionales sanitarios o del paciente o consumidor Estos errores pueden estar relacionados con la práctica profesional, con los productos, procedimientos y sistemas, incluyendo la prescripción, la comunicación, etiquetado, empaquetado, envasado, denominación, preparación, dispensación, distribución, administración, educación, seguimiento y utilización de los medicamentos. (National Coordinating Council for Medicine Error Reporting and Prevention NCCMERP).

¿Qué son los Acontecimiento adverso por medicamentos (AAM)

Daño grave o leve, causado por el uso terapéutico (incluyendo la falta de uso) de un medicamento o bien cualquier daño resultante de su uso clínico.

Acontecimientos adversos no prevenibles: son aquellos AAM que se producen a pesar del uso apropiado de de los medicamentos (daño sin error) y se corresponden con las Reacciones adversas a medicamentos (RAM).

¿Qué son las Reacciones adversas a medicamentos (RAM)?

Respuesta nociva y no intencionada que se produce cuando se administra un medicamento a las dosis utilizadas normalmente en el ser humano para la profilaxis, diagnóstico, tratamiento de una enfermedad o para la modificación de una función fisiológica. Son inherentes al propio medicamento, no se producen por error y por tanto son inevitables.

¿Qué es la farmacovigilancia?

Es una actividad que realizan las Administraciones sanitarias y que tiene como objetivo la identificación, cuantificación, evaluación y prevención de los riesgos asociados con el uso de los medicamentos comercializados. Para ello todos los agentes implicados en el ciclo del medicamento (laboratorios farmacéuticos, autoridades sanitarias, médicos, farmacéuticos, personal de enfermería y pacientes) tienen el compromiso de proporcionar la información que permita identificar las reacciones graves y desconocidas en el momento de su autorización, contribuyendo así a prevenir su frecuencia y gravedad. Como consecuencia de esta actividad, las autoridades sanitarias podrán adoptar las decisiones que aseguren que los medicamentos disponibles en el mercado presentan una relación beneficio-riesgo favorable para la población en las condiciones de uso autorizadas.

Acontecimientos adversos prevenibles: Son aquellos causados por errores de medicación. Suponen daño y error.

Acontecimientos adversos potenciales: Errores de medicación con potencial de causar daño pero que no lo han causado debido a circunstancias específicas, suerte, o porque el error es interceptado y corregido antes de que llegue al paciente. El análisis de estos último se considera importante, porque permite identificar los puntos en los que falla el sistema y se producen errores, y aquellos en los que funciona y los errores se consiguen interceptar y evitar.

Errores banales:

Son aquellos que tienen escasa o ninguna capacidad de producir daño.

Notificación de los errores adversos

Conocer cuáles son los errores y donde y por qué se producen es clave para evitarlos. Los programas voluntarios y no punitivos de notificación, que recojan las comunicaciones efectuadas por los profesionales sanitarios de los incidentes que observan en su práctica profesional, es el método básico de detección de errores de medicación y constituye un elemento clave para la creación de una cultura de seguridad.

Instituto para el uso seguro del medicamento (ISMP-España) del Institute for Safe Medication Practices

Recomendaciones para la prescripción de antibióticos: patología infecciosa de ámbito comunitario

La patología infecciosa constituye uno de los motivos más frecuentes de consulta en los servicios sanitarios, ya que uno de cada diez pacientes que acueden a este servicio lo hace por un proceso infeccioso.

La selección del tratamiento empírico de las infecciones, basado en el conocimiento de las resistencias a los antibióticos, constituye un elemento fundamental para la toma de decisiones, mejorar los resultados del tratamiento y contener las resistencias bacterianas. No hay que olvidar que el amplio uso de los antibióticos se asocia con la aparición de resistencias bacterianas, que constituyen un grave problema de salud pública.

El Plan de Acción para la Mejora en el Uso de los Medicamentos 2009-2011 (PAMUM) se ha diseñado para facilitar la toma de decisiones a los profesionales médicos y los servicios de farmacia que atienden a pacientes afectados por patologías infecciosas y que son tributarios de recibir tratamiento en el ámbito comunitario. Pero además, está orientado a intentar asegurar una continuidad asistencial a los pacientes, ya sen tratados en su Centro de Salud, en un Servicio de Urgencias de Atención Primaria o en un Servicio de Urgencias de cualquier Hospital de la Región de Murcia.

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